Gracias por traerme al mundo.

Gracias por mostrarme qué es el amor verdadero y sincero, y que tenemos que ser leales con quienes queremos.

Gracias por estar en mis mayores logros y también caídas.

Gracias por enseñarme que todos los actos tienen consecuencias.

Gracias por poner una sonrisa cuando más lo necesito.

Gracias por llorar conmigo cuando estoy triste.

Gracias por enseñarme que no todo es color de rosa en la vida, pero que siempre hay luz al final del túnel.

Gracias por apoyarme en mis mayores decisiones.

Gracias por explicarme que la perfección no existe.

Gracias por mostrarme que hay que respetarse a uno mismo y a los demás.

Gracias por inculcarme unos valores, tan necesarios hoy en día.

Gracias por mostrarme la belleza y sencillez de las pequeñas cosas.

Gracias por tener paciencia y calma cuando yo no la tengo.

Gracias por enseñarme que la familia es lo más importante.

Gracias por recordarme que valgo más de lo que creo cuando a mi se me olvida.

Gracias por repetirme “el tiempo todo lo cura” cuando yo no veo salida.

 

GRACIAS DE CORAZÓN POR TODAS LAS LECCIONES DE VIDA.

¡GRACIAS POR ESTAR SIEMPRE!

 

Dedicado a todas las madres del mundo. Estén o no con nosotros, sabemos que su espíritu y esencia siempre nos acompaña.

 

¡TE QUIERO MAMÁ!

El equipo de Torre Gallén.